Los dos Reglamentos Europeos REACH y CLP han causado y seguirán causando grandes cambios dentro de toda la industria química:
REACH (Registration, Evaluation, Authorisation and Restriction of Chemicals) estipula que casi todas las sustancias químicas que son importadas o fabricadas en la UE deben estar registradas.
CLP (Classification, Labeling and Packaging of substances and mixtures) pretende elevar y armonizar estándares globales de protección de la salud y la seguridad de los consumidores, la seguridad de los trabajadores y el medio ambiente en general.
Estos reglamentos están allanando el camino para un entendimiento mucho mayor del impacto de las sustancias químicas sobre la salud humana y el medio ambiente. Este impacto se comunicará a lo largo de toda la cadena de suministro. Las fichas de datos de seguridad (FDS) desempeñarán un papel clave en esta transferencia de información. Además de su contenido actual, estas fichas de FDS también describen usos identificados, escenarios de exposición y prestan asesoramiento sobre el manejo seguro.
CLP redefine los criterios de clasificación para las propiedades físicas, toxicológicas y ambientales de sustancias y mezclas. También regula el etiquetado y armoniza la comunicación relacionados con riesgos (por ejemplo, a través de pictogramas consistentes).
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